Una de las últimas técnicas de decoración es el hierro oxidado, por lo que si te gusta esta técnica o simplemente quieres acabar con el óxido o restaurarlo, en Ferrolan puedes encontrar el producto necesario para ello.

El óxido es una reacción natural del hierro y el oxígeno en presencia de agua o humedad en el aire. Por lo general, se presenta como una capa de partículas de color bronce oscuro, naranja, rojo y marrón. Hay muchos tipos de óxidos, como el cardenillo que se produce en el cobre y otros metales.

¿Qué es la oxidación?

La oxidación es un fenómeno que ocurre naturalmente cuando ciertos metales se exponen al oxígeno y al agua durante un período de tiempo.

La composición química actual del óxido es 4Fe 3O2 = 2Fe2O3. Los únicos metales que se oxidan son el acero y el hierro. Otros metales pueden corroerse pero no oxidarse. Este es un cambio químico real que ocurre cuando los metales comienzan a oxidarse.Si se dejan en un ambiente completamente seco, el hierro y el acero no se oxidarán. Es cuando se agrega humedad que comienza el proceso de oxidación. Debido a que el aire que respiramos contiene humedad, se oxidará incluso si no se agrega agua al metal. Hay suficiente hidrógeno y oxígeno en el aire para permitir que los átomos se unan con el hierro. Esto crea la reacción química conocida como oxidación o corrosión.

¿Qué imprimación podemos utilizar para proteger el hierro y el acero de la corrosión?

Para proceder a la imprimación de la superficie utilizaremos un shop primer epoxi como Primer de Fosder Lecker. Ofrece una buena protección anticorrosiva y, además, proporciona una buena adherencia por ser una imprimación de anclaje. Tenemos que aplicar dos capas para evitar zonas sin imprimación.

Es una base de secado rápido. Pasados ​​15-20 minutos podemos proceder a pintar del color que hayamos elegido. Se puede aplicar un esmalte sintético como Primacric: Primacric 10 de Lecker o uno de mayor calidad como el esmalte de poliuretano Primacric 20 de Lecker, que aporta mayor durabilidad.

PREPARACIÓN DE LA SUPERFICIE

La superficie debe estar limpia, seca y desengrasada.

Si las superficies son brillantes (con pintura previa que no esté oxidada) se deben lijar hasta que queden mate.

Luis García Sanders
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