La mejora muy interesante es la aplicación de un impermeabilizante en el primer año de la monocapa, una vez terminado el secado se aplica el impermeabilizante, que es completamente transparente, para que el mortero quede aún más limpio y neutro – permeable.
Este tratamiento debe repetirse cuando ya no sea efectivo.Dependiendo del impermeabilizante utilizado, la duración puede variar entre uno y diez años.
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Agua a presión
Al finalizar la limpieza, y para eliminar los restos de manchas y suciedad que puedan quedar, así como el detergente, terminar recorriendo toda la superficie con agua a presión utilizando. lavado a presión.
Ahora que sabemos cómo limpiar una cara de una sola capa, hay algunos trucos que podemos usar para evitar que se ensucie tan rápido. Además, estos productos nos ayudarán a evitar problemas de humedad o condensación en el interior, ya que se encargan de repeler el agua y evitar que las paredes la absorban.
Limpieza con agua a presión
Finalmente utilizaremos agua a presión para eliminar los restos de producto y suciedad. Esta operación puede tener que repetirse más de una vez para eliminar completamente las manchas.
Ahora que conocemos los pasos básicos de cómo limpiar un rostro monocapa, te resumimos algunas claves que siempre debes tener en cuenta:
Eliminar la mayor parte de la suciedad con métodos mecánicos
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Las manchas más evidentes, como las provocadas por la humedad y/o la suciedad, deben eliminarse a mano con un cepillo. De esta forma, no será necesario que hagamos mucha presión con el agua en el siguiente paso, lo que nos ayudará a no dañar el revestimiento monocapa.
Según el tipo de cara monocapa que se trate, deberás utilizar una brocha más gruesa o más fina. Por ejemplo, en el caso de un mortero monocapa, utilice una brocha de cerdas relativamente suaves, y si es una cara monocapa del tipo cotegran (piedra proyectada), puede utilizar una brocha un poco más rígida.
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Si una vez no es suficiente, se repetirá la operación hasta eliminar por completo las manchas. Debido a la acumulación de polvo, diversos agentes meteorológicos y el simple paso del tiempo, las fachadas se deterioran con el tiempo, se ensucian o pierden su color original. Sobre esto, hay que tener un cuidado perfecto, también para evitar la proliferación de hongos, humedad y ácaros. Y además de ofrecer una amplia gama de colores, garantiza la personalización del trabajo con distintos tipos de acabados. Finalmente, utilizaremos agua a presión para eliminar cualquier resto de producto y suciedad. Esta operación puede tener que repetirse varias veces para eliminar completamente las manchas.