Pasamos ahora a la plata, otro material muy utilizado en el diseño de muebles. Para limpiarlo necesitas una mezcla casera de bicarbonato de sodio y agua. Una mezcla que debemos utilizar para frotar la pieza de plata y así eliminar las manchas y el óxido. Si la pieza es pequeña y tenemos esa cómoda posibilidad de lavarla directamente en agua con jabón líquido, hagámoslo. Ahora que ya sabes cómo limpiar la plata, hazlo periódicamente para mejorar sus propiedades estéticas. Para el cobre, otro clásico de los muebles, tendremos que utilizar una nueva mezcla: en esta ocasión se trata de vinagre de vino blanco con un poco de sal, aunque también podemos utilizar zumo de limón si nos resulta más cómodo. En cualquier caso, frotando suavemente alrededor de la pieza conseguiremos que recupere todo su esplendor. Al igual que con el resto de temas, la respuesta a cómo limpiar el cobre es sencilla y tenemos que ponernos manos a la obra. Pero todavía tenemos dos grandes metales más para mirar.
Estamos hablando de aluminio y bronce. Pero, ¿cómo limpiar el aluminio en casa para que quede ideal y recupere toda su belleza? Muy fácil: solo necesitaremos agua y detergente líquido. Después de todo, toda la cubertería es esencialmente de aluminio y la limpiamos así. En el caso de manchas muy pegajosas, y como ya todos sabemos, bastará con dejarlo en remojo con agua caliente y detergente líquido. En pocas horas será mucho más fácil quitar esas manchas y dejar la pieza perfecta. Finalmente, ¿cómo limpiar el bronce? Aquí no hay truco: utilizamos la misma técnica que se utiliza para limpiar el aluminio. Recuerde siempre secar con un paño suave después de enjuagar y frotar. Ah, y si se trata de una pieza de bronce tallado, que tiene ciertas características especiales, sugerimos frotar con un cepillo suave una mezcla de agua y jugo de limón. ¡Te quedará perfecto! Cuida tus metales y te durarán mucho más. Además, puedes utilizar estas técnicas para tus reformas.
Índice de contenidos
Aprende a quitar el óxido del bronce
La superficie rojiza de un objeto de bronce indica la presencia de cuprita. Sin embargo, en contacto con el aire, el óxido cuproso cambia rápidamente a óxido cúprico o tenorita, que tiene un aspecto marrón oscuro o negro.
El bronce oxidado se restaura con oxidantes especiales para metales. Encuentra los mejores productos en la tienda de MasFerretería.
Cómo limpiar el hierro oxidado con vinagre
El ácido acético del vinagre blanco de limpieza funciona como un detergente que ayuda a aflojar y disolver la suciedad, lo que le dio un punto de partida en esta guía para eliminar el óxido de hierro, y si se mezcla con limón su efecto también es económico y no tóxico, por lo que puedes usarlo para quitar las manchas de otras superficies con manchas rebeldes, grasa rebelde o suciedad de mascotas.
Cómo limpiar los accesorios
Ver ¿Cómo limpiar los accesorios?
Otras formas de quitar el óxido del metal
- Si la pieza es pequeña, puedes remojarla en vinagre de vino blanco durante varios días. El óxido permanecerá en el contenedor. Por otro lado, la cola actúa de manera similar al vinagre.
- Frota el óxido con una patata pelada a la que le has añadido unas gotas de líquido lavavajillas.
- Espolvorea sal sobre la zona afectada y añade unas gotas de limón. Dejar actuar y frotar con un cepillo.
- Frotar la zona afectada con pasta de bicarbonato (ver receta en este enlace).
- También se puede eliminar por electrólisis, que consiste en conectar una fuente de alimentación (batería o pila) a dos electrodos sumergidos en agua.