Uno de los colores predilectos en la decoración de espacios es el color marrón. De hecho, la pintura marrón es considerada por los especialistas como una de las más intensas y versátiles en el mundo del diseño de interiores.
Es un tono de pintura que inspira confianza y seguridad, además de comodidad, sobre todo cuando es empleada en zonas del hogar donde se desea transmitir seriedad y estilo. En esta ocasión te daremos algunos tips sobre su uso para que puedas sacarle el máximo provecho.
La pintura marrón transmite confianza
Una de las características que posee la pintura marrón es que al tratarse de un color que posee varias tonalidades que transmiten el mismo efecto de sensibilidad y seguridad, puede emplearse en diversos ambientes. El color marrón se obtiene de una tonalidad naranja oscura que tiene mucha semejanza con el color de la tierra.
Por ello no es casualidad que cuando se busca decorar ambientes exóticos se combine el color marrón con colores vegetales como el verde o en el caso de ambientes cálidos, con los colores rojo, amarillo o naranja.
Si tu casa se encuentra rodeada de un ambiente netamente rural, la pintura marrón es la opción más segura y efectiva, ya que todas sus tonalidades conocidas como tonalidades arena, aportan la elegancia y la serenidad que buscas. En este sentido, al tratarse de tonalidades neutrales, se convierten en un complemento perfecto para transmitir la calidez del hogar, creando a su vez entornos de relajación si son combinados con otros colores o tonalidades claras.
La pintura marrón tiene clase
Si estás en búsqueda de transmitir con tu decoración una sensación de seriedad, distinción y clase, el marrón es una apuesta segura, ya que será el mejor complemento para muebles, bibliotecas, máscaras africanas u obras de tonalidades marrones oscuras.
Es una pintura adecuada para sitios espaciosos donde en ocasiones se necesita calidez, sin embargo es bueno que sepas que los colores neutros son sus acompañantes ideales, tales como el blanco, el gris o el negro. Estos transmiten el equilibrio que buscas en el lugar.
Si deseas conseguir con la pintura marrón un ambiente cálido y de relajación, lo correcto es combinarlo con el color beige, el color arena o el color crema. En cambio, si buscas imprimirle dinamismo a la estancia, se puede buscar mayor alegría con el fucsia, el verde claro o incluso el turquesa, dándote a su vez un entorno más moderno. Si optas por combinar esta pintura con colores exóticos como el amarillo o el naranja, el resultado será un toque más retro.
Seguro que has convivido con la pintura marrón en tu casa en algún momento de tu vida. Cuéntanos tu relación con el color marrón, si te gusta o no y cómo lo combinarías.
