Cuando terminamos de limpiar nos gusta que todo luzca nuevo, para demostrar que lo hemos intentado, pero que hay cosas más difíciles de limpiar que otras o que requieren más cuidado. Por ejemplo, los objetos decorativos dorados pueden quedar bien en algunos estilos decorativos, pero requieren de mucho cuidado si queremos que no pierdan el ojo. Estos son algunos consejos para limpiar objetos de oro:
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Cómo limpiar metal dorado
Hay millones de muebles diferentes en el mundo y por lo tanto es posible que encontrarlos todos los tipos de metal. Pero en El Rincón de mi Taller queremos ser prácticos y hablarte de cómo limpiar los metales más usados en la fabricación de muebles. Y por supuesto, entran los metales dorados. Al fin y al cabo, como vimos en algunos artículos como el dedicado al art déco, algunos estilos sacan el máximo partido al color dorado. La pregunta es, ¿cómo limpiar el metal dorado de manera efectiva? Pues muy sencillo: basta con sumergir estos metales en agua mezclada con amoníaco al 50%. Hay otras formas, por supuesto, pero esta nos da una gran ventaja adicional: no tendremos que buscar pequeñas herramientas para llegar a los rincones más pequeños de la pieza para limpiarlos. En cualquier caso, en nuestro artículo sobre la limpieza del latón encontrarás algunos otros consejos que se pueden extender a otros metales dorados.
Ahora, pasando a la plata, otro material muy utilizado en el diseño de mobiliario. Para limpiarlo, necesitas una mezcla casera de bicarbonato de sodio y agua. Una mezcla que debemos utilizar para frotar la pieza de plata y así eliminar el deslustre y el óxido. Si la pieza es pequeña y tenemos esa cómoda posibilidad de lavarla directamente en agua con jabón líquido, vamos. Ahora que ya sabes cómo limpiar la plata, hazlo periódicamente para mejorar sus propiedades estéticas. Para el cobre, otro clásico de los muebles, tendremos que utilizar una nueva mezcla: en esta ocasión se trata de vinagre de vino blanco con un poco de sal, aunque también podemos utilizar zumo de limón si nos resulta más cómodo. En cualquier caso, frota suavemente alrededor de la pieza para que recupere todo su esplendor. Al igual que con el resto de temas, la respuesta a cómo limpiar el cobre es simple y solo tenemos que ir al grano. Pero todavía tenemos dos grandes metales más para examinar.
Como limpiar superficies doradas
Puedes comprar uno de los miles de productos que hay en el mercado para hacer esta tarea, a nosotros nos gusta ahorrar dinero y utilizar productos caseros, por eso te enseñaremos trucos para realizar una limpieza profunda y económica de muebles dorados. Para limpiar superficies doradas, olvídate de usar limpiadores de metales, pueden dañar el material y con el tiempo acumular más suciedad.
El amoníaco es una solución mucho más económica y conveniente; Simplemente mezcle amoníaco y agua a partes iguales e introduzca los objetos o partes metálicas que desee limpiar; O si no puedes traerlos, solo aplica la mezcla sobre las superficies que quieras limpiar; Verás la diferencia en poco tiempo.
Consejos sobre cómo limpiar un reloj de bronce antiguo
Primero, es importante considerar qué tipo de objeto debes limpiar. No es lo mismo un reloj con mecanismo mecánico que uno electrónico. Vale la pena recordar que los elementos deben estar desconectados de la fuente de energía eléctrica antes de ser limpiados. Tener en cuenta si son piezas que se pueden sumergir. En ese caso, puedes hervir el artículo en agua para facilitar el proceso.
En el caso de los relojes, es recomendable pulir la superficie. Use una bola de algodón empapada en una solución de vinagre y unas gotas de agua. No es recomendable utilizar productos abrasivos en las joyas, salvo indicación del fabricante y sólo si se observan manchas azul verdosas.
Usos del bicarbonato de sodio para la limpieza
¿Cuáles son los beneficios del bicarbonato de sodio para la limpieza? Este poderoso producto natural elimina las manchas de bicarbonato de sodio. Y, asimismo, es capaz de borrar la opacidad de estas superficies. Para utilizarlo basta con añadir un chorro de jabón neutro de glicerina a 100 gramos de bicarbonato, se forma una pasta para untar sobre el metal. Luego enjuague con agua y finalmente pase un paño absorbente para secar.
Los metales son populares porque son materiales extremadamente fuertes y pueden durar mucho tiempo. Sin embargo, con el tiempo pueden oxidarse y eso los vuelve malos. Cabe señalar que la oxidación se produce porque este material entra en contacto con la humedad, haciendo que pierda su oxidación. Aquí hay dos trucos principales para limpiar metal oxidado.