Con el tiempo pueden aparecer desperfectos o desconchones en las encimeras de aglomerado. Veamos como tratar cada caso.
Las encimeras de aglomerado son una opción económica y duradera para muchas cocinas y áreas de trabajo en el hogar. Sin embargo, con el tiempo, pueden sufrir daños, como arañazos, quemaduras o abolladuras. Afortunadamente, muchas de estas imperfecciones pueden repararse de manera efectiva, lo que prolongará la vida útil de tu encimera. En este artículo, te guiaré a través de los pasos para reparar una encimera de aglomerado y devolverle su belleza original.
Índice de contenidos
Materiales necesarios
Antes de comenzar, asegúrate de tener a mano los siguientes materiales:
- Kit de reparación de aglomerado: Puedes encontrar estos kits en la mayoría de las tiendas de mejoras para el hogar. Contienen masilla, resina y pigmentos que coinciden con el color de tu encimera.
- Cuchilla: Una cuchilla de uso general.
- Lija: Papel de lija de grano fino y grueso.
- Trapos limpios.
- Guantes de goma.
- Mascarilla: Para protegerte de los vapores durante la reparación.
Pasos para la reparación
Paso 1: Limpieza
Comienza limpiando la encimera con un limpiador suave y agua tibia. Asegúrate de que esté completamente seca antes de continuar.
Paso 2: Preparación de la masilla
Mezcla la masilla del kit de reparación de acuerdo con las instrucciones del fabricante. Agrega pigmentos si es necesario para que coincida con el color de tu encimera.
Paso 3: Aplicación de la masilla
Rellena cualquier abolladura, arañazo o agujero con la masilla preparada. Utiliza una espátula para alisarla y nivelarla con la superficie de la encimera. Deja que se seque según las indicaciones del fabricante.
Paso 4: Lijado
Una vez que la masilla esté completamente seca, utiliza papel de lija de grano grueso para igualar la superficie. Luego, cambia a un papel de lija de grano fino para suavizar la reparación y hacerla uniforme con el resto de la encimera.
Paso 5: Acabado
Aplica la resina incluida en el kit de reparación siguiendo las instrucciones del fabricante. Esto restaurará el brillo de la encimera y protegerá la reparación. Lija suavemente una vez más si es necesario.
Consejos adicionales
- Mantén la ventilación: Asegúrate de que la zona esté bien ventilada para evitar inhalar vapores perjudiciales.
- Usa guantes: Protege tus manos con guantes de goma durante todo el proceso.
- Trabaja con cuidado: Sé meticuloso al aplicar masilla y resina para lograr resultados óptimos.
Reparar una encimera de aglomerado no es difícil si sigues estos pasos y tienes los materiales adecuados a tu disposición. Con un poco de esfuerzo, podrás devolverle a tu encimera su aspecto original y prolongar su vida útil.
Nota: Si la encimera tiene daños graves o si no te sientes cómodo realizando estas reparaciones por ti mismo, es recomendable consultar a un profesional.
Cómo reparar una encimera de madera
No es lo mismo una encimera de madera que una de granito o conglomerado. El secreto de la lijadora que utilizaremos es eliminar la capa superficial de la madera afectada por los ataques. Digamos que es algo así como el peeling facial que nos hacemos las mujeres, pero aplicado sobre la madera del mostrador. Retiraremos la mayor cantidad de superficie posible hasta que quede una superficie nueva y lisa. Luego llegará el momento de barnizar, con barnices al agua o al aceite, para dar brillo a la encimera y, sobre todo, protegerla.
Ocultar daños en las encimeras de madera
Las encimeras de madera o de materiales que imitan la madera son más vulnerables a los arañazos y al desgaste cuando forman parte de las encimeras del hogar. Sin embargo, también son los más fáciles de reparar. No necesitamos ser carpinteros para esto, como veremos a continuación.
Cuando se trata de desperfectos menores, como un simple rasguño que afea la superficie de la encimera de madera, basta con cubrirla con un tinte especial. En el mercado existen rotuladores táctiles para madera, que tapan arañazos o desgastes siempre que no sean profundos.
La solución está al alcance de la mano
Algunas personas se echan la manta por la cabeza y deciden pintar su escritorio para darle un aire nuevo. Para ello, limpie la melamina con un producto desengrasante y luego con alcohol desnaturalizado, teniendo cuidado de no tocar la superficie con los dedos para no volver a aplicar la grasa. A continuación, lije con lija del nº 100 y, si es posible, con lijadora delta para facilitar el trabajo.
Volveremos a quitar el polvo con un trapo y alcohol y aplicaremos dos manos de sellador sintético con rodillo de esmalte. Para el acabado es necesario dar dos manos de pintura (a ser posible de dos componentes para que sea muy resistente), así como lijar el cilindro y la pintura después de que se seque con lija nº 600. Finalmente, lijar la pintura con un trapo y Cera incolora para devolver brillo y tacto suave.