Cuando una bola termosellada está ligeramente pinchada, podemos repararla fácilmente y sin mucho trabajo. Todo lo que tienes que hacer es seguir unos pocos pasos.
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Como podéis ver en el vídeo, primero hay que poner la clara de huevo en la bola con una jeringa, y luego batirla durante unos minutos, mientras se unta.
Después de eso, presiona de nuevo hasta que la clara comience a salir por el agujero. Por último, hay que poner la pelota al sol unas horas y ¡listo!
“La clara de huevo tiene dos proteínas en su composición química: la ovmucina y la ovoalbúmina, ambas bajo ciertas condiciones -como el calor- forman un coágulo insoluble que puede adherirse a la cavidad. Es similar a lo que sucede cuando cocinamos un huevo frito; la parte blanca sería un coágulo, como gelatina dura, y esto no permitiría que el aire se escape de la pelota. Además, tiene una capacidad adhesiva que permite que la goma del balón se adhiera por efecto de las proteínas contenidas en la blanca”.
Estos son los pasos a seguir:
1. Evacuar el aire restante en la bola perforada. 2. Llene la jeringa con clara de huevo. 3. Inyecte la clara de huevo en el globo a través de la válvula de inflado. 4. Haz 2 o 3 veces. 5. Agite el globo para que la clara de huevo se extienda por todo el globo y pueda llegar al poro de punción. 6. Llene rápidamente. 7. Dejar reposar una hora antes de volver a utilizar.
¡Se han establecido monedas justas!
Si notó que su bola perdió fuerza en el último juego y se desinfló gradualmente, probablemente tenga un pequeño agujero que no puede ver. Lo ideal es repararlo para dejarlo como nuevo.
Muchas tiendas de deportes venden kits antipinchazos, con los que puedes solucionar tu problema de forma fácil y sencilla sin tirar la pelota al contenedor.
¿Cómo saber si el balón de fútbol está bien inflado?
Según el reglamento FIBA (1), la presión interna debe ser tal que si dejas caer la pelota desde una altura de 180 cm. debe saltar a una altura que oscila entre 96 y 116 cm. (en todos los casos medidos desde la base de la pelota). Saltar demasiado alto es tan malo como saltar demasiado bajo.